Leía a Jaime Campmany en su libro “Romances” y me topé con el poema que a continuación reproduzco y que fue escrito en 1.991:
Los barandas socialistas
nos tienen fritos a impuestos
y entre la renta y el IVA,
los tributos indirectos,
la Seguridad Social,
las retenciones, los diezmos,
las licencias, los recargos,
la matrícula del perro,
contribución, plusvalías,
pagos al Ayuntamiento,
gravámenes y catastros,
alcabalas y derechos,
nos están dejando a todos
desnudos y casi en cueros,
con el bullarengue al aire
y los culitos pajareros.
¿Les recuerda a algo o a alguna situación este poema?
A mí sí, pero lo siento porque lo tengo claro: he decidido no escribir del Gobierno y mucho menos de la subida tan impresionante, la mayor de la historia, de los impuestos. Y no voy a escribir porque no voy a conseguir nada. Acabaremos pagando, todos los españoles, 60 euros más al mes y se acabó el problema. Y además estoy de acuerdo con el Presidente en eso que dice que hay que ser solidario. Por eso a partir del 1 de julio, el pensionista que perciba la pensión mínima y el dueño de Zara, la mayor fortuna del país, pagarán lo mismo, un 12,5 % más en el recibo de la luz. Así somos solidarios los pobres con los ricos y todos pagamos lo mismo.
Como ven no merece la pena hablar de este tema, porque para eso ya está el gomoso Pepiño que dijo que “subir los impuestos es tan de izquierdas como bajarlos”. ¡Vaya níspero acabas de largar Pepiño! Nunca debes llevar la contraria a tu jefe Z-P que dijo hace un año que bajar los impuestos es izquierdas y ahora sales tu parafraseándolo y diciendo gilipoyeces. Además creo que lleváis en vuestro epistolario socialista la defensa de la subida del IVA porque es progresista. Me encantaría saber como se defiende esta bobada ante los mileuristas, los jóvenes en paro, los trabajadores o ante los pensionistas con pensión mínima. Saben que un mileurista tendrá que pagar un salario al año para pagar esta subida.
Por eso he decidido no hablar ni escribir de este tema porque lo van explicar mucho mejor que yo, la Pajín y sus 30.000 acólitos socialistas de las organizaciones sectoriales a los que ha dado instrucciones para explicar a los ciudadanos que la subida de impuestos “es para que les permitan tener empleo”. Me figuro que será a ellos o a los miles de liberados sindicales. ¿Cómo explicarán a los españoles (no me gusta la palabra ciudadano porque me recuerda a la Revolución francesa) que la subida de impuestos es progresista y que es un pequeño esfuerzo para mantener las prestaciones sociales de los más desfavorecidos? ¡Que hipocresía usáis, “compañeros”, para defender vuestros errores!
“No hables de política ni de fútbol si no quieres perder a un amigo”. Yo he perdido a un amigo por discutir si Zapatero había mentido o no a los españoles. A lo mejor tenía razón mi amigo, porque cuando Z-P dijo que no subiría los impuestos, no le entendimos bien y se estaba refiriendo a las SICAV (Sociedades de Inversión Colectiva) de los ricos que cotizan los rendimientos al 1% y los demás cotizaremos los rendimientos, de las cuatro acciones o pequeños ahorros que tenemos, al 19 o 21 %. Cuando habló de que no había crisis tampoco le entendimos bien, porque se refería a que no había crisis para los miles de paniaguados, asesores, abogados de secano, economistas de pega, mamandurrieros de enchufe y paniaguados de breva, (como los llama Campmany), que cobran dos o tres sueldos del Estado y de otros sitios (léase mordidas y otras prebendas) o que se refería que no había crisis para los Botín, las Koplowich, los Abelló y demás parientes. Por eso he decidido no hablar de este tema y eliminar de mis escritos las frases hoy tan utilizadas como: subida para dinamizar la economía; ajuste de las cuentas públicas; aumento equitativo; es una subida beneficiosa para la mayoría (Alonso dixit) y otras muchas con las que nos están mareando estos días para justificar lo injustificable.