El Keeper

Aunque me gusta el futuro pues en él voy a vivir lo años que me queden, no hay duda que recordar las cosas buenas del pasado me ayudan a encarar ese futuro con más alegría.

Aquellos años de finales de los sesenta y principios de los setenta eran años donde la alegría corría por las venas y el veraneo en El Escorial era no sólo el mejor de la sierra sino donde más y mejores fiestas se organizaban en los muchos sitios de esparcimiento que existían.

De algunos ya hemos hablado en estas páginas y hoy le toca el turno a una discoteca que hoy cumpliría 40 años de su inauguración.

Tal día como hoy 5 de agosto pero de 1.971, se inaugura en El Escorial la discoteca Keeper. Aunque en la página web figura como fecha la de 1.969, mi amigo Francis Marcos que sirvió copas allí, me asegura que fue en agosto de 1.971 de la mano de sus fundadores y dueños: Juan Carlos Ochoa y Enrique Ruiz del Portal (Curro). Juan Carlos Ochoa luego inauguraría, junto a Manolo Míguez, el Restaurante Charolés y Enrique Ruiz del Portal, amigo y compañero mío pues aunque lo dejó enseguida, empezó Arquitectura. Falleció hace pocos años (q.e.p.d).

A nadie que hubiera vivido aquellos años se le escapa que esta discoteca, primera de las que existieron con este nombre, fue la que marcó una época quizás en respuesta a una demanda de cambios creciente en la juventud del país. Eran años donde nacían muchos lugares de esparcimiento en la sierra madrileña: Flánagan, la Cuadra del Tío Agustín, El Mono… pero ninguno tuvo el éxito del Keeper en la Villa del Escorial.

Al principio de su inauguración como se decía entonces, todos los “pijos” de la sierra o de la capital, pasaban los fines de semana por la discoteca. Gente de Rallys  y de carreras de coches ayudaban a ese ambiente “pijo” que muchos criticaban pero que nadie de la época, del pueblo o de la colonia, dejó de pasar por allí. Dio trabajo a mucha gente del pueblo y de la colonia que muchas veces trabajaban juntos. Me cuenta Francis, que por allí pasaron camareros como Gil, Fernando Garijo (q.e.p.d), Antonio Vicente, el actual Alcalde de la Villa y su hermano Luis (q.e.p.d)….

Duró muchos años y el éxito de su marca y de su logo del caballo de ajedrez se extendió por varias ciudades españolas. En los años siguientes se crean la Discoteca- bar en Torrevieja; Los Keeper de Madrid en la c/Alcántara, en Arapiles y en la c/ Juan Bravo y se abren dos locales en Ibiza y otro en Marbella.

Además del magnífico ambiente que allí se respiraba, en El Keeper se organizaban fiestas que ayudaban a amenizar el veraneo muchas veces falto de alegría por estos lares. Fiestas que han marcado una época como la de la Vaquilla el día de San Fermín. Se introdujo una vaquilla en la discoteca y con palés de madera se organizó una plaza en medio de la pista, donde se toreaba a la asustada vaquilla. En la fiesta no faltó de nada. Fermín “El Hechicero” colocó en la puerta su puesto de tabaco, caramelos y chicles y con su pañuelo rojo al cuello daba color a la fiesta. Me cuentan que dejaba el “kiosco” sólo y entraba a tomar una copa. A la salida le habían dejado más dinero de lo que valía el tabaco o el chicle que se habían llevado.

Si el ambiente era único, la mejor música del momento ayudaba mucho a conseguirlo, manejada por jóvenes disk jockey de la colonia que aunque algunos estudiaban, en sus horas libres, parecían verdaderos profesionales de la música. Aquí recordar a Juan Petisco que fue durante muchos años “pincha discos” de la discoteca Tartufo, muy de moda en Madrid y copiloto de rallys con Zanini. También y años más tarde pincharon discos gente conocida por estos lares como Roger, Eduardo Picabea o Álvaro Aguirre.

Ahora ha quedado para almacén de lo que fue Don Marcos hoy rebautizado con el nombre de Keeperback. Ya me gustaría que su dueño se echara “palante” y algún día decidiera volver abrir la discoteca tan emblemática en El Escorial.

8 pensamientos en “El Keeper

  1. Eduardo

    Hola, creo que te olvidas a uno de sus dueños, Jose Luis Cue (Churro).

    Saludos y muy buenas historias.

  2. Marcos

    Sobre AQUA, que información tenéis?
    Yo me acuerdo de cuando era pequeño y ibamos al parque de La Manguilla, tengo una breve imagen del sitio en puro estado tottal de abandono.

  3. berta alonso sperotto

    Si, te has olvidado de Jose Luis Cue… con el que estuve alli muchusimas noches. Churro era un emblema, intimo de Carolo… cerrabamos el Keeper. Otro asiduo era Juan San de Madrid. Qué maravilloso tiempo, el mejor ambiente y la amistad.
    Si sabes algo de Churro, me encantaria que me lo mandaras. Siempre me he acordado de el, de todo aquello, de Javier Junquera.
    Espero que me puedas informar. Bs. Y gracias por la sonrisa que sale, solo con recordarlo.

  4. Eduardo Alvarez

    Juan Carlos Ochoa fue otro de los dueños que inauguró keeper en el Escorial en 1968 para celebrar sus fiestas privadas con sus amigos y grupos de corredores de rallys, que se reunirán para celebrar «cualquier cosa», porque su padre estaba harto de la discoteca privada de su casa . Pero aquello aumentó y se convirtió en un negocio en agosto del 1971. El encargado era Curro (Cuñado de Francis) que abandonó la sociedad y se fue a Torrevieja para abrir otro keeper y luego expandirá el negocio a Ibiza, marbella, madrid, etc, momento en el que Churro recibió una oferta de trabajo y lo puso de moda.
    La fiesta más esperada del verano y cuando acudía más gente era la fiesta Hawaiiana, que se celebraba en agosto. El alma de las fiestas eran Junquera, Juan Sanz (Juanillo), Jose Luis Cue (Churro), Juan Carlos (El Ochoa), en primera línea, luego otros, un paso atrás. Era de los primeros locales que hacían «caravana» con un Mehari, recorriendo con 20 coches más los pueblos de la sierra. Garijo y Barry en la puerta. Fernando, Pocholo, y los dos «ratones» en las barras. Los Dj,´s Roger (pajaro loco ), Alfredo trajo el soul y Fernando Flores introdujo el estilo americano de los 70´s de Estudio 54 de NY, (9 años de Dj, el que más tiempo duró) se llevó varios premios nacionales como DJ. El entró a trabajar en Keeper porque el DJ de aquel verano de 1978 (Pachi), murió de una borrachera de ginebra.
    El declive comienza cuando los jefes deciden inaugurar Keeper de Arapiles, llevandose a todos sus amig@s a una sala más «pija» que pusieron «de moda». La afluencia fue tal, que se reciben denuncias por la reserva del derecho de admisión cada semana, y salieron en los periódicos por la exclusividad de su aforo. Y es que no cabía un alma más. El punto más crítico fue en el 82 cuando un inspector de policía, al que se le bloqueó la entrada, hizo lo imposible para cerrarles el negocio. Pero se salvó del cierre a última hora por un indulto que había decretado Rosón, ministro del interior de UCD de aquel entonces, gracias a cierta señorita, de la que me gustaría acordarme, y que ayudó a que el ministro recibiera la petición. Keeper del Escorial se le había pasado el arroz, y no hubo nadie que lo levantara hasta su cierre. Hoy en día la disco de Arapiles sigue funcionando con el nombre de Snobissimo y Churro al frente.

  5. Tony (seudónimo)

    He descubierto tu «Blog», Jesús, por casualidad buscando en «Google» información sobre las Bizcotelas de El Escorial.
    Te conozco en San Lorenzo desde principios de los años 60 (nuestros maravillosos años 60 y parte de los 70). Para mayor acercamiento te recordaré que se te conocía igualmente por Escabe….., mote que no quiero reflejar por si te pudiera molestar, si bien era una denominación cariñosa en base a tu guapura juvenil.
    Bien, no es mi intención hablar de las maravillosas bizcotelas escurialenses, sino más bien de lo olvidadizos que resultan vuestros comentarios que he podido leer, al darme una «vuelta rápida por tu blog». Me refiero principalmente a los referidos a Keeper.
    He tenido, tengo y espero seguir teniendo durante muchos años, una gran vinculación con la música. Dicha afición me hace recordaros y precisar algunos detalles muy importantes para el devenir «festivomusical» de ambos Escoriales, el de arriba y el de abajo (gurriatos y caciques).
    El verano de 1968, dentro y al amparo del «movimiento discoteca» de Madrid, se inaugura en Cercedilla la primera discoteca de la sierra de Madrid. Me refiero a Flánigan (no Flanagan), propiedad de Miguel Arias, descendiente de la famosa familia Arias de Cercedilla y Puerto de Navacerrada. Yo era, solamente de forma amistosa, su representante en los Escoriales (no me refiero a la urbanización). Ese mismo verano, nuestro querido J.M. Serrat inaugura El Ojo Izquiedo del Escorial, del que me hago yo responsable el año 1970 por encargo de Virgilio, al que por cierto injustamente no hacéis ninguna mención, siendo como fue el creador del mayor sitio de reunión de «veraneantes» de la época. Me refiero evidentemente, como seguramente habréis imaginado, a La Cueva. Ese mismo año 70, llevamos a actuar al Ojo Izquierdo a Julio Iglesias, al cual apoderaba mi familiar y también «veraneante» desde niño, Alfredo Fraile. Pasaron igualmente por allí los Grimm, Pablo Abraira, etc.
    Igualmente en El Escorial de abajo, existía primero La Guitarra como un «garito» de copas y música, que a finales del 69 principios del 70, lo convertimos unos cuantos, también de forma amistosa, en La Oveja Negra. Entre ellos Luis Noain, que fue quien introdujo en El Escorial a su amigo Curro, del Keeper que mencionáis, casado con mi querida amiga Gisela Marcos, hermana de Francis y Toñín Marcos, quien en 1974 abre el Bar de copas Don Marcos y unos meses después pasa a regentar Francis hasta su cierre. Otro referente muy importante de la época fue el Don Marcos mencionado. Toñín y su hermano Ginín Marcos, fueron los fundadores, precisamente en El Escorial de abajo, de uno de los primeros, junto con los Estudiantes de mi también muy amigo José Barranco al que conozco en La Granja (precursor de la música Rock española), grupos de Rock de finales de los 50 y principios de los años 60. Me refiero a los Tonys, al que años después se incorpora Micky.
    Como veréis, mis comentarios han tratado de hacer justicia con toda una serie de lugares de reunión, míticos de los años 60/70 en los Escoriales (vuelvo a no referirme a la urbanización) de arriba y abajo como a mi me gusta recordar. La Cueva, El Ojo Izquierdo y La Oveja Negra son anteriores a Keeper y Don Marcos tres años posterior.
    Saludos,

    Tony

    P.D.: Me advierten textualmente: «Tu conexión con este sitio Web no es segura», por lo tanto utilizo seudónimo.

  6. Tony (seudónimo)

    Releyendo mi anterior comentario, lamentablemente he olvidado mencionar el primer Club de música y copas existente en San Lorenzo del Escorial. Quizás mi olvido ha sido como consecuencia de centrarlo todo desde la aparición del «movimiento Discoteca», pero evidentemente hubo un antes. Se trata del Club Sarmiento, mejor conocido por El Farolillo Rojo, al principio de la calle Sarmiento de Bengoa hoy Juan Abelló (calle en la que él vivió junto con su hijo Juanito Abelló) gran benefactor del barrio del Rosario y de su iglesia. Durante unos cuantos años (desde 1964 hasta la apertura del Ojo Izquierdo en 1968) es el lugar para bailar y escuchar música en directo interpretada por nuestros amigos los hermanos Salcedo, Gorka y Laumari, acompañados a la batería por Luis Bilbao y al bajo y guitarra de Javier Santias. Se hacian llamar Los Popes and los Momes, en alusión graciosa a The Papas and the Mamas, el grupo de moda de aquellos años. Luego Virgilio, que era su fundador y propietario al igual que La Cueva y El Ojo, se lo traspasó durante unos años a Billi, el dueño de la fábrica de hielo y representante de la cerveza Henninger, quien lo transformó en un Club de alterne (el único que ha existido en san Lorenzo junto con otro posterior en El Escorial, también regentado por Billi).
    En otro orden de cosas, merece la pena acordarse por lo que significó para muchos de nosotros, el Bar de Víctor, conocido como El Manitas (evidentemente el nombre hacía referencia a la acromegalia que padecía). Qué ratos más agradables y emotivos pasábamos en pandilla, alrededor del vino y del antiquísimo mostrador de nuestro entrañable amigo Victor el Manitas.
    Reitero mis saludos,

    Tony

  7. Pizca

    Mucho me temo que han pasado muchísimos años y por eso comprendo tantos, tantísimos lapsus como hay en este post. Mi padre, Luis Ruiz del Portal, era uno de los dueños que junto con su hermano, mi tio Curro, después montaron en Keeper de Torrevieja, La Manga, Madrid (Alcántara), Madrid (Juan Bravo: REFERENTE de la noche madrileña durante más de 30 años) e Ibiza que sigue abierto y funcionando como un tiro (excepto en este periodo Covid que esperemos que pase muy pronto).
    Una nota MUY importante es que mi pobre tio Enrique, aunque efectivamente estudió arquitectura, NO ESTÁ MUERTO! Está vivito y coleando y tan alegre y divertido como siempre.

    Podría entrar en MUCHÍSIMAS correcciones a los que posteriormente han comentado porque, nada más lejos de la realidad, pero no importa. Lo único que importa es que sé que todos pasasteis unos años maravillosos allí y cada uno que lo recuerde como quiera que para eso han pasado ya 50 sños y os tomasteis más de una copichuela por alli… ???

    Un abrazo fuerte a todos y que vivan los recuerdos y VIVA KEEPER!

    P.D: Curro y Churro son distintos. Y Churro es el que montó el Keeper en Arapiles (según mis datos, les dejaron utilizar el nombre porque en esos años los caballeros funcionaban así) y mi tio Curro sí falleció pero Churro sigue en Arapiles llevando Snobissimo de una forma espectacular y con el público (muy pijo para mi también, pero ¿qué tiene eso de malo?). Es un local que funciona increíble también y tiene muchísimo mérito aguantar al pié del cañón en la noche madrileña a lo largo de tantos años.

    Un abrazo a todos

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *