La foto
Con este título Alfonso Ussía describe y analiza la foto de familia- mal avenida- que con motivo de los fastos de los cincuenta años de reinado de Isabel II se han celebrado en el Palacio de Windsor. Con su maestría describe a cada uno de los que en la foto chirriaban, con el adjetivo idóneo y adecuado a su situación. De todos el que más me ha gustado, es el calificativo de “tonto” que ha dado al badana, bodoque y calzorra de Mónaco que nos dejó sin Olimpiada. Escribe Ussía: “Ahí posó, en primera fila, el simpático golfo de Mswati III, Rey de Swazilandia, decimoquinta fortuna del mundo, dueño y señor de todas las vírgenes swazis. Ahí estaba el supermillonario Sultán de Brunei, nada partidario de reconocer a las mujeres el derecho de sufragio. Lestie III, Rey de Lesotho, una nación arruinada a costa de su fortuna personal. El tirano Rey de Bahrein, y los sospechosos malayo, kuwaití, tailandés y el heredero de Abu Dhabi.”
Sigo leyendo La Razón -normalmente empiezo a leerlo por la última página, la de Ussía- y llego a otra foto, la del G-8 con los mandatarios más importantes del mundo alrededor de una mesa redonda, sonrientes (con la que está cayendo) y todos sin corbata. Obama, Cameron, Medvedev, Merkel, Van Rompuy, Durao Barroso, Yoshihiko Noda, Mario Monti, Harper y Hollande. Sí, son diez en el G-8, pero eso entra dentro de la perplejidad como dice Álvaro Martínez en “ABC”. Parece más que una importante reunión, la mesa de una boda celebrada en agosto y en la que por el calor se han quitado todos la corbata menos la Merkel. Luego vendrá la chaqueta. No puedo entenderlo. Todos con traje o chaqueta pero sin corbata. ¿Estarían haciendo un guiño a los “indignados” del 15-M o a los antisistema? Quizás en la próxima reunión llevarán “rastas”, un perro y entrarán a la reunión del G-8 tocando la flauta como verdaderos “perrroflautas”. Después se quitaron la chaqueta (ver la foto del Mundo) y ya parecen más normales, en mangas de camisa y algunos con jersey.
La reunión ha sido en Camp David la residencia del anfitrión que por idílica y bucólica que sea, se merece otra forma de comer alrededor de una mesa. Se me antoja que si la reunión se celebrara en Marbella aparecerían en bermudas o traje de baño que sería una gozada ver a la Merkel en un dos piezas o traje con faldita como a principios de siglo. O si fuera en Madrid todos vestidos de chulapos con su palpusa (gorra), babosa (camisa), su chopín (chaleco) y sus alares (pantalones) de cuadros.
Por eso me he permitido plagiar el título de este capítulo de mi blog llamándole “La foto”. Realmente ambas fotos son dignas de comentarlas cada una desde una perspectiva distinta, pero ambas, para aptas para desentrañar todo lo que llevan dentro. Cada uno es muy libre de hacer sus propias consideraciones y esta ha sido la mía. La otra la de Ussía.